Dijo Amós, el profeta de profetas: "Quiero que la justicia sea tan corriente como el agua, y que la honradez crezca como un torrente inagotable". Isaías, poeta bíblico, sentenció: "Si hubieras estado atento a mis leyes, la dicha te habría inundado como un río". ¿Por qué hoy esas citas del Antiguo...