Las necesidades insatisfechas de la ciudadanía alimentan las campañas electorales. Los candidatos se prodigan con los electores potenciales. Visitan sus comunidades y viviendas, les estrechan las manos o los abrazan, se hacen selfies sonrientes, les hacen promesas y, eventualmente, les regalan diversas cosas, desde camisetas y gorras hasta alimentos variados....