En el marco de los procesos institucionales de actualización y mejora que de manera permanente ejecuta la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA), la Facultad de Ingeniería y Arquitectura realiza esfuerzos encaminados a impulsar la innovación y fortalecer la capacidad tecnológica. Para esto, se ha apostado, entre otras acciones, por la construcción de infraestructura (laboratorios, centros de cómputos, etc.), la creación de nuevas carreras, la firma de alianzas con diferentes industrias del país y la adquisición de equipos. Esto ha permitido mantener y elevar la excelencia académica que caracteriza a las carreras de la Facultad.
De acuerdo a Carlos Rivas, vicerrector académico adjunto, el trabajo por la innovación tiene como uno de sus objetivos principales consolidar el potencial de las ingenierías y la arquitectura de la UCA para “crear cosas nuevas, no necesariamente que no existan en el mundo, pero sí generar productos académicos que no se fabrican en el país” y así contribuir al desarrollo económico, social y científico nacional.
Y es que, como explica Rivas, “la idea en ingeniería y arquitectura es hacer cosas”. En esa línea, la Universidad aplica un esquema de enseñanza-aprendizaje en el que, primero, los estudiantes adquieren fundamentos científicos: teorías, modelos matemáticos y toda herramienta conceptual que permita definir proyectos. Luego, los alumnos pasan a la etapa de moldear y simular a través de programas informáticos. Y, posteriormente, se construyen y validan prototipos, que varían según la carrera. Por ejemplo, en Ingeniería Eléctrica, un circuito; o en Ingeniería Mecánica, una pieza que será sometida a pruebas para conocer su resistencia.
“Este es el esquema bajo el cual enseñamos. La UCA tradicionalmente se ha enfocado en la parte de conceptos. Dicen que somos muy teóricos porque le damos mucho énfasis a esta etapa. Pero también promovemos la práctica, los talleres y el hacer cosas. Creemos que para poder hacer esto último, el fundamento es importante, es la base”, explica Rivas.
Precisamente para potenciar la creación y validación de prototipos, y complementar así la formación teórica de los estudiantes de la Facultad, la UCA ideó y construyó el Centro de Diseño, Innovación y Tecnología, que concentra todos los recursos y equipos de la Universidad especializados en crear y probar modelos. El Centro cuenta con talleres de torneado, fresado, impresión 3D, carpintería, soldadura, ensamble, cerámica y pintura; y con un salón con 80 computadoras aptas para la ejecución de programas de diseño y simulación de alta gama. Asimismo, contará con espacios enfocados en el diseño y el desarrollo creativo de los estudiantes.
El Centro está ubicado en el campus y cuenta con cuatro plantas de espacios amplios y abiertos (3,951 metros cuadrados de construcción). Para la obra se utilizó un sistema de materiales prefabricados, cuya principal ventaja es que genera menos escombros y desperdicios, disminuyendo así el impacto ambiental. El edificio, explica Javier Cerón, arquitecto de la Dirección Administrativa de la Universidad, tiene un “acabado industrial”: sin cerámica en el piso, sin cielo falsos, con tuberías vistas, etc. Hay ventilación natural en cada nivel; únicamente se instaló aire acondicionado en los espacios que albergan equipos que requieren temperatura controlada. Además, el Centro cuenta con un elevador, gradas de emergencia y paneles de iluminación LED (en todos los niveles). También está preparado para montar cámaras de seguridad y dispondrá de un sistema de control de incendios.
De cara al potencial a largo plazo de esta nueva infraestructura, se instaló un módulo de escaleras principal que conecta hasta el techo, lo que permitirá un acceso directo para la instalación y mantenimiento de paneles solares.
El Centro, cuya inauguración oficial se realizará en las próximas semanas, está a disposición de los estudiantes de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura, específicamente de aquellos que cursan Arquitectura, las ingenierías Mecánica, Eléctrica e Industrial, y la Maestría en Diseño de Productos.
En definitiva, el Centro, dice Carlos Rivas, además de afianzar la parte conceptual en los estudiantes, les ofrece un espacio idóneo para construir y probar sus propios diseños, y desarrollar sus habilidades para generar productos de ingeniería. Esto les facilitará abrirse puertas no solo en el ámbito de la investigación académica, sino también en las áreas empresarial y de emprendimiento.