En la primera entrega de este comentario sobre las elecciones internas de ARENA, que se publicó el pasado, se mostró que en términos globales, las elecciones de este partido fueron competitivas. 125 candidatos se postularon para participar en las elecciones legislativas de 2018, para los 35 escaños que alcanzó el partido en las elecciones anteriores. Además, se observó, como era de esperarse, los departamentos donde ARENA sacó más diputados son los que tienen mayor cantidad de candidatos.
En la línea de lo anterior, se prometió seguir investigando, para determinar la medida en que quienes ya ocupan un escaño tuvieron asegurado o no su puesto de reelección. La tabla que sigue muestra información de los postulantes que sacaron más votos que los diputados propietarios en su departamento. En el resto de departamentos (11 de 14) y casos (7 de 35), los que cuentan con un escaño en la Asamblea Legislativa han obtenido sistemáticamente mayor cantidad de votos que aquellos que los desafiaron en las elecciones internas.
La conclusión que se puede sacar a partir de estos datos es que en muy pocas ocasiones las elecciones internas de ARENA entregaron resultados sorpresivos. Es decir, se han visto pocos momentos en que los desafiantes han podido desbancar a los que ya ocupan un curul en la Asamblea Legislativa. Desde esta perspectiva, queda claro que para la gran mayoría de los militantes del partido que votaron en estas elecciones, éstas eran un mecanismo para ratificar a sus representantes. En este sentido, las elecciones no fueron una justa reñida. Así, tampoco se han de verse como el mecanismo de renovación de la clase política que algunos les han adjudicado.