"Lo importante es la gente": oferta electoral en campañas

 “El poder es como un violín. Se toma con la izquierda
y se toca con la derecha".
Eduardo Galeano, escritor uruguayo

En periodos electorales (o preelectorales) como los actuales, las estrategias discursivas implementadas por los participantes en estas contiendas son más cercanas a los mensajes publicitarios comerciales, que buscan principalmente posicionar y vender un producto, que expresar mensajes políticos que presenten transparentemente los intereses e idearios de sus respectivos partidos. De ahí que no resulte extraño que las candidaturas, ya sea de un partido de derecha o izquierda, presenten tácticas persuasivas muy similares de aproximación a la ciudadanía, desdibujándose esas posiciones ideológicas bastante diferenciadas en otras épocas.

Muestra de ello es la plataforma “Mi gente” que lanzó recientemente el empresario y expresidente de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), Javier Simán. Desde esta, el empresario recorre distintos lugares del país y se reúne con diversos sectores de la ciudadanía para conocer sus inquietudes e intereses, y al mismo tiempo, posicionarse como posible candidato a la presidencia. Este es un aporte que ha retomado el marketing político del marketing comercial: “investigación del mercado”. Para preparar la oferta del producto – oferta electoral en tiempos de campaña- se requiere la recolección de información sobre los intereses, expectativas y preocupaciones de los públicos objetivo (en este caso de la ciudadanía).

Desde esta plataforma “Mi gente”, se expresa una aparente desconfiguración de ideologías, al ofrecerse algunos mensajes discursivos muy similares a los presentados por partidos o movimientos más vinculados a la izquierda: “la esperanza de todos”, “la voz de todos los salvadoreños”, “donde los olvidados son escuchados”. Incluso, como discurso de esta iniciativa, se manifiesta un desligamiento de la derecha, al lanzar también el mensaje “ni de derecha, ni de izquierda, lo que me mueve es mi gente”. Esta posición estratégica de campaña de desligamiento partidario es coherente con lo que sostienen distintos autores sobre la pérdida de credibilidad de los partidos políticos y el desencantamiento de la población de las opciones partidarias actuales, como lo señaló también el Iudop (2017, p.16): “Al consultar a la gente si consideran necesario que el país tenga otro partido de izquierda, distinto al FMLN, el 59.2% se mostró a favor de la existencia de otra fuerza política de izquierda, frente el 39.3% que se opuso a esta posibilidad. El 1.4% no respondió. De igual manera, al preguntar a la población si ven necesario el surgimiento de otro partido de derecha, diferente a Arena, el 64.7% se mostró a favor, mientras que el 33.7% no lo ve necesario. El 1.6% no opinó al respecto”.

Con una plataforma de consulta- como la abordada en este texto- surge la interrogante: Si lo importante es la gente, independientemente de su posición política y social, ¿qué tanto los intereses, expectativas y preocupaciones de los sectores “más populares”, “los más pobres”, “los no escuchados”, “los olvidados”, consultados en estas iniciativas y que aparecen en las fotos publicitarias en tiempos de campañas, trascenderán a un programa electoral y, en el caso de un triunfo, a un programa de gobierno?

Fuente de consulta: Iudop (2017) Los salvadoreños evalúan el tercer año de gobierno de Salvador Sánchez Cerén. Boletín de prensa Año XXXI, No.3. Disponible en: http://www.uca.edu.sv/iudop/wp-content/uploads/BOLETIN-2017-3.pdf