En respuesta a la emergencia provocada por el huracán Ida, la Clínica de Asistencia Psicológica de la Universidad proporciona ayuda psicológica a los afectados. María Emma Posada, directora de la Clínica, explica que se trata de una intervención en tres sesiones cuyo principal objetivo es el abordaje psicológico de ciertos temas, como la sensación de desamparo y la muerte de parientes y/o vecinos, para canalizar adecuadamente el desahogo de sentimientos. "Después de esto, las personas podrán dar inicio a su duelo de una mejor manera", asegura.
El trabajo se lleva a cabo con personas afectadas de los municipios de Ilopango y San Vicente. Después de que el huracán Ida provocara el desbordamiento de ríos y diversos derrumbes en algunas laderas de esos lugares, muchos de sus habitantes perdieron a familiares y amigos, y toda o una considerable parte de sus pertenencias. La incapacidad para canalizar el miedo, dolor y nostalgia que una vivencia así genera puede provocar conflictos psicológicos.
Posada dice que en la iniciativa participan más de setenta personas. "La mayor parte de los que estamos trabajando en ello somos voluntarios, y recibimos apoyo de los alumnos de quinto año de la Licenciatura en Psicología y otros que ya se graduaron".
Los albergues donde se brinda la asistencia psicológica son el Santa Teresita, en Ilopango, y los del polideportivo y la escuela Antonia Galindo, en San Vicente. Los tratamientos se programaron para tres domingos consecutivos: 22 y 29 de noviembre y 6 de diciembre.