“Los juicios de derechos humanos, ¿esperanza para las víctimas en El Salvador?” fue el título del foro organizado por la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (Fespad), la Fundación para el Debido Proceso y el Idhuca.
Alcanzar justicia y la judicialización de los crímenes de lesa humanidad es una de las tareas pendientes de El Salvador. La Universidad, a través del Idhuca, trabaja por hacer funcionar la institucionalidad para la investigación y esclarecimiento de muchas de las masacres, asesinatos y torturas ocurridas durante el conflicto armado.
Sin embargo, persisten los obstáculos que bloquean el camino hacia la justicia. Entre estos, uno de los más graves, la ley de amnistía, cuya vigencia mantiene al país atrapado en un círculo de impunidad que no permite la reparación de las víctimas de la guerra ni el acceso a la verdad.
Para conocer cómo otros países han avanzado en materia de derechos humanos y justicia para los crímenes de lesa humanidad, en el foro, realizado el martes 17 de noviembre en el Auditorio Elba y Celina Ramos, se contó con las reflexiones y análisis de Naomi Roht-Arriaza, experta en justicia transicional y profesora del Hastings College of Law de la Universidad de California (Estados Unidos), quien abordó el tema “De las amnistías a los juicios, ¿cuál es el camino?”; Orlando López, jefe de la Fiscalía de Derechos Humanos de Guatemala, con la ponencia “El juicio contra Efraín Ríos Montt”; y David Morales, procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, quien habló sobre “La impunidad del pasado, tragedia del presente”.