Hombres y mujeres para los demás

"Nuestra principal preocupación es formar hombres y mujeres para los demás", dijo Andreu Oliva, rector de la UCA, durante su discurso en los actos de la octogésima quinta graduación de la UCA, efectuados el 1 de junio en el Auditorio "Ignacio Ellacuría".

Oliva explicó a los nuevos profesionales y a sus familiares que, como institución educativa confiada a la Compañía de Jesús, la UCA quiere "contribuir desde la actividad propiamente universitaria a la transformación de la sociedad, en busca de niveles más profundos de justicia y libertad". Esta misión exige a la Universidad que enfoque sus recursos y capacidad para formar "profesionales que busquen la excelencia en su trabajo y que no duerman tranquilos si no logran hacer bien las cosas (...), personas que se sientan responsables de su prójimo y de la realidad que les rodea, que no puedan aceptar que sus hermanos sean marginados o denigrados".

El Rector animó a los graduados a trabajar en sus respectivos campos con seriedad y a unir esfuerzos para eliminar las barreras que impiden el cambio social. Explicó, además, que asumir la responsabilidad con la situación actual del país implica, entre otros aspectos, "renunciar a los privilegios y solidarizarnos con aquellos que sufren la exclusión".

En los actos se entregaron 325 títulos de grado y posgrado, específicamente de los profesorados en Educación Especial para Nivel Básico, en Idioma Inglés para Tercer Ciclo de Educación Básica y en Teología; de los técnicos en Contaduría Pública y en Mercadeo; de las licenciaturas en Administración de Empresas, en Ciencias de la Computación, en Ciencias Jurídicas, en Contaduría Pública, en Comunicación Social, en Economía, en Mercadeo, en Psicología y en Teología; de Arquitectura y de las ingenierías Civil, Eléctrica, Industrial, Mecánica y Química; así como de las maestrías en Ciencia Política, en Comunicación, en Derecho Penal Constitucional, en Derecho de Empresa, en Desarrollo Local, en Dirección de Empresas, en Filosofía Iberoamericana, en Finanzas, en Política y Evaluación Educativa, y en Salud Pública.

En cada uno de los tres actos, un representante de los nuevos graduados dispuso de un lapso para dirigirse a las autoridades universitarias, a sus compañeros y a sus familiares y amigos presentes. En sus palabras, coincidieron en reconocer los sacrificios y dificultades que tuvieron que afrontar para alcanzar el título profesional; y aseguraron estar comprometidos con el país y con trabajar por su transformación. Así lo dijo Rafael Durán, graduado de la Licenciatura en Ciencias Jurídicas: "Debemos asumir el reto de construir un mejor El Salvador, aplicando siempre nuestro saber en favor de la igualdad y la justicia social. (...) buscar y difundir la verdad, esa que tanto se nos ha ocultado para no dejarnos ser libres".