Poco después de la publicación de la última encuesta del Iudop, un funcionario del Gobierno publicó este tuit: “Tuvieron que repetir la encuesta, pero les salió peor”. La intención era obvia: mostrar un dato del sondeo de opinión que beneficia a la actual administración. Cuestionar la ética de trabajo del Iudop le resultó obligado para no poner en entredicho la narrativa gubernamental sobre la UCA. Al respecto, lo primero a aclarar es que no hay tal encuesta repetida, sino que se trata de dos encuestas diferentes. La primera, presentada el 25 de mayo, se enfocó en exclusiva en la percepción ciudadana sobre el estado de excepción. La segunda, publicada el 2 de junio, versa sobre la evaluación ciudadana del Gobierno, que el Iudop realiza todos los años desde hace décadas.
En la primera se preguntó a la población su opinión sobre el estado de la delincuencia a partir del 27 de marzo, fecha en que se aprobó el estado de excepción; el 78.7% de los y las encuestadas respondió que había disminuido. En la encuesta de evaluación de gobierno, la pregunta sobre la delincuencia fue de carácter general, sin relacionarla a una medida o acción gubernamental en concreto; un 88.2% de los encuestados respondió que había disminuido. Aunque la respuesta sea coincidente, se trató de dos preguntas distintas, de dos encuestas también distintas. Por otra parte, hay que hacer notar que en el primer sondeo, del 78.7% que dijo que la delincuencia había disminuido, una cuarta parte (24.8%) piensa que las capturas masivas se hacen para mejorar la imagen del presidente.
Las encuestas de la UCA buscan dar voz a la población, especialmente para que los tomadores de decisión la escuchen y la atiendan. La credibilidad y el reconocimiento, nacional e internacional, del Iudop es producto del profesionalismo y ética mostrados en sus 35 años de vida; fruto de su trabajo independiente, ajeno a las presiones e intereses de cualquier grupo de poder. La percepción favorable de la población sobre el presidente y su gestión es mayoritaria y, como siempre, fiel a su profesionalismo, el Iudop la comunicó tal cual. De igual manera, si la opinión de la población llegara a cambiar, los datos se publicarán tal cual.
Ahora bien, convendría para la buena marcha del país que, en medio de su regocijo por el mayoritario respaldo social obtenido, el Ejecutivo repare en que, en la encuesta sobre el estado de excepción, el 16.7% piensa que los 87 asesinatos cometidos entre el 25 y 27 de marzo obedecieron a la ruptura del pacto entre el Gobierno y las pandillas, y que 20.8% de la gente en el área urbana conoce a personas que han sido capturadas de forma injustificada. En la encuesta de evaluación, ciertamente, la mayoría aprueba la gestión del Ejecutivo, pero las opiniones favorables han decrecido en el último año, lo menos valorado es la situación económica y 84 de cada 100 personas no se sienten beneficiadas por el bitcóin. La gente no vive de sueños ni de tuits que pretenden ser ingeniosos; necesita oportunidades para mejorar sus condiciones de vida.