Una nueva etapa para El Salvador

14
Editorial UCA
02/06/2014

Después de escuchar el discurso de toma de posesión de Salvador Sánchez Cerén, es difícil no sentir ánimo y esperanza; de caminarse por las vías que el Presidente señaló, sin duda el país empezará a escribir otro capítulo de su historia. El nuevo mandatario, más que hacer promesas, definió el modo en que quiere gobernar, los grandes principios de su gestión, y eso es mucho más importante que definir de entrada las metas a alcanzar. Se ha comprometido con claridad a gobernar para profundizar la democracia, con apertura y respeto a la pluralidad, buscando la concertación con todas las fuerzas, promoviendo la justicia social y el desarrollo económico en beneficio de toda la población.

Es importante destacar cómo Sánchez Cerén asume esos compromisos: con humildad y el respaldo de muchos años de lucha por la democracia y la justicia. Quiere ser el Presidente de todos los salvadoreños, tanto de los que viven en el territorio nacional como de los que emigraron; tanto de los que votaron por él como de los que no lo hicieron. Quiere gobernar con honradez, austeridad, eficiencia y transparencia, cuatro principios esenciales para un servidor público, pero también para un país donde el ejercicio del poder ha destacado por lo contrario. Sánchez Cerén fue enfático al insistir en que no permitirá la corrupción ni el despilfarro de los bienes públicos, refiriéndose a estos como "bienes sagrados" del pueblo que deben servir exclusivamente para su desarrollo y bienestar.

El nuevo Presidente es realista, sabe muy bien en qué situación está el país, conoce las dificultades que enfrenta en materia económica, fiscal, de seguridad pública. Está al tanto de las agudas desigualdades entre los salvadoreños y de los obstáculos que muchos compatriotas enfrentan para simplemente sobrevivir. La situación es compleja, pero parece estar decidido a trabajar en la solución de los problemas nacionales, poniendo lo mejor de sí para que El Salvador avance hacia un mayor desarrollo. Y está consciente de que esta tarea no es posible culminarla con éxito sin el apoyo de todos los sectores de la sociedad; no en balde hizo, en repetidas ocasiones, un llamado a todos los actores para trabajar unidos.

Salvador Sanchez Cerén también ha dejado claro que su Gobierno trabajará por la justicia social, y que en ella se fundamentarán los principios éticos y el sentido de su gestión. Por ello, promoverá un desarrollo económico que vaya de la mano del social, lo que supone impulsar la producción y generar empleos dignos, con salarios justos, y respetar los derechos laborales; invertir en la gente para potenciar las capacidades de un pueblo trabajador y emprendedor. La justicia social es una de las principales deudas de la sociedad salvadoreña y es el anhelo de la mayoría.

La justicia social supone el absoluto respeto a la igual dignidad de todas las personas, la plena vigencia de los derechos humanos, la igualdad de oportunidades, la equitativa distribución de los bienes y la posibilidad de que cada salvadoreño pueda realizar su proyecto de vida. Trabajar por la justicia social implica edificar una sociedad que no margine a nadie, que se preocupe de los más vulnerables y que busque el bien común y el bienestar de todos sus miembros. La justicia social es diametralmente opuesta al capitalismo salvaje que se ha adueñado del mundo y que busca la máxima ganancia en base a la explotación de los trabajadores y la especulación financiera.

Como profesor, Sánchez Cerén conoce de primera mano la importancia de la educación en el desarrollo de un pueblo, y ha señalado que la reforma educativa y una mayor inversión en el sector serán pilares para garantizar el futuro del país. Ofrecer más oportunidades educativas a la juventud y animarla a soñar en grande y a ser parte de este proyecto llamado El Salvador son signos inequívocos del modo en que el nuevo Gobierno desea trabajar para la prevención del crimen y la violencia. En esta línea, es muy buena señal que el Presidente se haya comprometido a ponerse al frente del Sistema Nacional de Seguridad Ciudadana, y a combatir la delincuencia en todas sus formas, fortaleciendo las instituciones que deben enfrentar el crimen y facilitando la rehabilitación de los delincuentes en los centros penales por medio del trabajo. Está consciente de que la situación de la criminalidad requiere de un acuerdo de país y atacar sus causas estructurales.

Por otra parte, Sanchez Cerén no olvidó mencionar la necesidad de reconciliación de la familia salvadoreña y la deuda moral con los desaparecidos y con la verdad. Su deseo es que acabe la historia de dolor y sangre, y que desaparezcan la injusticia, el odio y el miedo de El Salvador; nobles deseos que compartimos la mayoría. Como compartida es también la convicción del nuevo Presidente de que hay lugar para todos, de que este debe ser un país donde nadie se quede fuera. Este llamado no debe pasar desapercibido; las distintas fuerzas sociales no pueden hacer oídos sordos. La oferta a todos los sectores para ser parte de la construcción del futuro de El Salvador está hecha; no hay excusas para no aceptarla. Desde la UCA, deseamos que el estilo de gobernar descrito por Salvador Sanchez Cerén sea una realidad. Estamos seguros de que, de cumplirse, El Salvador entrará a una nueva etapa de su historia.

Lo más visitado
5
Anónimo
03/06/2014
15:20 pm
\"...es difícil no sentir ánimo y esperanza..\" Que este ánimo y esperanza de los editores de la UCA se transmita a al resto dirigente, docente y futuros graduados. QUe la UCA vuelva a sus raíces; las que sembraron los padres jesuitas asesinados.
0 2 0
Anónimo
03/06/2014
10:20 am
Muy ecuanime y alentador el Editorial de la UCA, senalando los principios con que quiere gobernar el Presidente Sanchez Ceren, un hombre consecuente con su lucha social desde su juventud, la invitacion a todos los sectores para construir un nuevo El Salvador, no debe caer en saco roto por ningun salvadoreno de bien, especialmente aquellos que se han servido del patrimonio nacional y que tienen una deuda moral etica con el pais. Se siento nuevos y buenos vientos para El Salvador, y la esperanza se abriga por ahora en todos y todas de alcanzar una reconciliacion que nos lleve a vivir en paz.
0 3 0
Anónimo
03/06/2014
09:20 am
Me gusta ahora la posición de la UCA, no como una semana antes de las segundas elecciones en Marzo que escuche con tristeza en la capilla de la UCA y luego a través de YSUCA el análisis tan corto de visión y quizá egoísta que decía que \"daba lo mismo por quien votar, ambos son unos mediocres\" Cual sería la política y actitud del gobierno ahora si hubiese ganado arena?
0 6 0
Anónimo
02/06/2014
14:37 pm
Resulta interesante observar la esperanza que tiene la UCA en el potencial del nuevo gobierno. Pareciera que ya han habido pláticas o acercamientos previos con el nuevo Presidente, quien al parecer ha sido congruente en el actuar y pensar desde hace años. Un actuar y pensar en sintonía cercana con la lucha que la UCA ha tenido desde hace años por el cambio social. Así, con base en estas ideas, animo a las autoridades a apostarle a fondo a este gobierno, no tanto pasivamente, sino mas bien de forma tal que el engranaje entre la UCA, sociedad civil y gobierno, constituya un factor clave para que este último no se eche para atrás en los compromisos planteados en la toma de posesión. Sin ser ingenuo, sugiero que la Universidad sea uno de los eslabones más fuertes en esta cadena de unidad y concertación para sacar al país de las arenas movedizas en las que se hunde hoy por hoy. Por favor no olvidar el medio ambiente!!!, que sin agua ni aire de nada sirve lo demás...
0 9 0
Anónimo
02/06/2014
12:38 pm
Acertado, ecu\'anime y bien entrado comentario al discurso de inauguraci\'on que pronunci\'o el nuevo presidente de la Rep\'ublica Prof. S\'anchez cer\'en.
0 9 0