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En El Salvador es común tanto que se transgredan los derechos humanos como que la gente no denuncie el hecho, ni se percate de la gravedad de la situación, ni sepa lo que puede y debe hacer para remediarla. Ante tal realidad, el Centro Cultural Universitario ejecuta, desde marzo de este año, el Proyecto para la Promoción y Difusión de los Derechos Humanos a través del Arte en varios municipios del país. El objetivo principal de este esfuerzo es concienciar a los salvadoreños sobre la importancia de los derechos humanos y animarlos a que los asuman en su vida cotidiana. "Nadie puede ignorar, disminuir o pisotear nuestros derechos; son nuestros y debemos conocerlos", afirma Paulino Espinoza, director del Centro. Además, se pretende informar a la población sobre cuáles son las instancias y mecanismos pertinentes para denunciar la violación de esos derechos.
El Proyecto se lleva a cabo a través de tres acciones transversales, que tienen al arte como principio motor de su desarrollo. La primera es la realización de Talleres de Promotores de Actividades Culturales, que hasta el momento se han impartido en Izalco (Sonsonate), Verapaz (San Vicente) y Nueva Concepción (Chalatenango).
Según explica Espinoza, en las diez sesiones que cubre la capacitación, la dinámica formativa está orientada a proveer de un enfoque cultural a jóvenes que participan en actividades de liderazgo en sus comunidades; personas que, por ejemplo, forman parte de la pastoral juvenil, equipo de fútbol, escuela o alcaldía de su localidad. "Lo que nos interesa es que los 40 jóvenes que reciban la formación desarrollen las actividades que realizan con un enfoque cultural, no importa la rama", señala Espinoza.
Entre los 20 contenidos que componen el currículo de los Talleres están algunos dedicados a conocer la historia del país y la identidad cultural salvadoreña; además, se estudian los conceptos de cultura, arte, arte popular y folclore. También se imparten técnicas para la elaboración de propuestas o proyectos, lineamientos para una gestión comunitaria eficaz y sugerencias para formular un discurso. Todos estos temas son abordados con el objeto de que los jóvenes puedan responder a tres retos específicos: trabajar por la identidad cultural en su pueblo o municipio; luchar por el rescate y conservación del medioambiente; y participar ciudadanamente dentro de su comunidad.
La segunda acción del Proyecto son las Jornadas de Difusión, en las que el grupo Kilómetro 0 (conformado por músicos de Exceso de Equipaje, Signo Azul y Trova, entre otros) visita municipios de San Salvador y del interior del país para concienciar e informar sobre los derechos humanos a través de la música. En cada concierto, Kilómetro 0 invita a artistas y grupos locales. Las Jornadas se han realizado ya en Izalco, Concepción Batres, Mejicanos y la colonia Zacamil, y se ha previsto visitar 30 municipios más.
Del mismo modo que las dos acciones anteriores, el programa radial Raíces, transmitido por YSUCA los viernes a las 9 de la noche, es esencial dentro del proyecto. "En ese espacio promovemos los Talleres y las Jornadas de Difusión, pero lo más importante es que informamos y discutimos alrededor de los derechos humanos, siempre con música alusiva", comenta Espinoza.
El Proyecto para la Promoción y Difusión de los Derechos Humanos a través del Arte es financiado por la organización no gubernamental española Ayuda en Acción, y recibe el acompañamiento y asesoría del Instituto de Derechos Humanos de la UCA (IDHUCA); específicamente, de las Defensorías de Derechos Humanos. Asimismo, cuenta con el apoyo de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) y de agentes locales en cada municipio.
