Con un tubo de ocho pulgadas de diámetro y 141 metros de profundidad, la UCA, con la gestión de la Dirección Administrativa, perforó un pozo para crear un sistema propio de abastecimiento de agua. La estructura se está construyendo sobre un nacimiento subterráneo ubicado en la zona verde junto a la entrada peatonal del campus.
En junio se hizo una prueba para medir el caudal de agua del pozo: durante 30 horas se extrajeron 150 galones de agua por minuto y el nivel bajó únicamente 29 pulgadas. Esto, según Álvaro Figueroa, director administrativo, demuestra que el líquido del lugar se recupera con gran rapidez y que, consecuentemente, tendrá una larga vida útil.
Cuando esté en funcionamiento, el agua del pozo se extraerá hacia una cisterna donde se le dará el tratamiento necesario para hacerla potable y apta para el consumo; y luego, se distribuirá a través de la red de tuberías ya existente.
Si bien el pozo aprovecha los recursos de uno de los mantos acuíferos de la zona, no habrá daño ambiental: el agua se extraerá de la misma fuente que utiliza la ANDA y no habrá incremento en el consumo. Además, el 60% del agua potable que se usa en la UCA está destinada al mantenimiento de las abundantes zonas verdes del campus, de manera que la mayor parte de lo que se extraiga regresará al punto de origen.
Ese ciclo de extracción y recarga se potencia por las amplias áreas con árboles y plantas con las que cuenta la Universidad, las que, de acuerdo a Figueroa, se mantienen y protegen de forma permanente: "No hay plan de quitar bosque (...). El crecimiento (del campus) está programado en altura. Esto garantiza que mantenemos los niveles de permeabilidad y mantos acuíferos en la zona. Es un área que tenemos protegida".
En la UCA se consume mensualmente un promedio de 6 mil metros cúbicos de agua, pero la cantidad varía según la época. En la temporada lluviosa se usan cerca de 4 mil metros cúbicos, pues el agua lluvia permite disminuir el riego de la cancha de fútbol y de los jardines; el resto del año, el consumo aumenta a 8,000 m3.
Con el sistema propio de abastecimiento, se prevé reducir costos y generar más conciencia sobre el uso racional del recurso. Actualmente, la UCA paga $1.80 por cada metro cúbico de agua; con el pozo, se pagará a la ANDA una tasa sobre la explotación y a esto se le sumará el gasto en electricidad por el funcionamiento de la cisterna. Así, el costo de producir cada metro cúbico será de aproximadamente $1.00.
Este proyecto se suma a otros esfuerzos que ya se han hecho en la UCA para optimizar y racionalizar el agua: se colocaron sistemas de control de presión (bombas y tanques) para evitar derrames y desperdicios en los sistemas de descarga de los inodoros; y con ese mismo propósito se cambió la grifería en los baños de los estudiantes. También, desde hace dos años, se implementa el programa de riego nocturno en áreas verdes durante la época seca para la optimización del recurso hídrico.