Los miembros de la Compañía de Jesús, a través de la Conferencia de Provinciales Jesuitas de América Latina y el Caribe (CPAL), y en unión con los compañeros apostólicos de más de un millar de instituciones que forman sus redes de educación, radio y comunicación, de capacitación social y asistencia humanitaria, de promoción humana, investigación y desarrollo, y de servicios pastorales, etc. —todas ellas inspiradas en la misión evangelizadora—, ante la campaña de calumnias y agresiones que sufren la UCA de Managua en sus estudiantes, directivos y particularmente su rector, el padre José Alberto Idiáquez, así como también otras instituciones y personas ligadas a la Compañía de Jesús en Nicaragua, manifestamos una vez más, clara y categóricamente, que
- lamentamos profundamente que continúe agravándose la crisis política de Nicaragua y que se haya interrumpido la posibilidad de diálogo entre el Gobierno y la oposición, con el consiguiente incremento del sufrimiento del pueblo nicaragüense;
- respaldamos plenamente a la UCA como ente universitario en su labor de enseñanza, investigación y servicio social, papel que ha cumplido con ejemplar dedicación desde los tiempos en que Nicaragua era una esperanza para el mundo, y que sigue desarrollando con total independencia a pesar del asedio y el acoso de que es objeto en los últimos años;
- afirmamos que, cumpliendo su función social principal, la cual es ser casa de sabiduría y de convivencia humana, la UCA ha dado muestras de absoluto profesionalismo en el ejercicio de sus funciones de enseñar, investigar y servir en función del bien común de todo el pueblo nicaragüense y del respeto a las libertades fundamentales de todos los ciudadanos;
- denunciamos, de manera firme y lo más amplia posible, ante la opinión pública y ante los organismos nacionales e internacionales, el asedio financiero, económico y físico constante del que ha sido objeto la UCA en los últimos tiempos;
- denunciamos particularmente la mentirosa y calumniosa campaña mediática de odio que, con la complacencia del Gobierno, se ha desarrollado en la última semana en contra de la UCA y de los jesuitas, de sus colaboradores y, particularmente, del P. Idiáquez, a quienes respaldamos plenamente en su servicio;
- responsabilizamos al Sr. Daniel Ortega y a la Sra. Rosario Murillo por la seguridad, vida e integridad de la UCA y de cada uno de sus miembros, sean estudiantes, académicos o directivos, y particularmente por la integridad y la vida del P. José Alberto Idiáquez, rector de la UCA.
“Dichosos los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Dichosos los perseguidos por causa de la Justicia, porque el Reino de Dios les pertenece” Mt 5, 9-10.
Firmado por el Presidente de la CPAL, provinciales jesuitas de América Latina y rectores, directores y coordinadores de más de mil instituciones de la Compañía de Jesús en el continente americano.
7 de febrero de 2020