Ya faltan pocos días para la cita del 1 de marzo. Dado que en esta ocasión se dan novedades importantes en la elección de diputados, es oportuno precisar algunas cosas a fin de informar al ciudadano sobre cómo ejercer el sufragio y cómo se procesarán los votos. En la práctica, las distintas formas de votar se reducen a tres. La primera: votar por un único partido; en este caso, se puede marcar la bandera del partido de preferencia y/o los rostros (todos o algunos) de los candidatos de ese partido. La segunda: votar por candidatos de distintos partidos y no partidarios; en este caso, no se marcan las banderas de los partidos, sino solamente el rostro de los candidatos o candidatas, en un número no mayor al total de diputados que corresponden al departamento. La tercera, que solo aplica a San Salvador en esta ocasión, pues es el único distrito electoral que cuenta con candidaturas no partidarias: votar solo por candidatos no partidarios, marcando sus rostros. Si un elector vota de cualquiera de estas tres formas, su voto será válido y habrá participado activamente en la elección de los diputados a la Asamblea Legislativa.
Ahora bien, sobre el conteo de los votos, en primer lugar, conviene recordar que cada ciudadano solo ejerce un voto, aun cuando marque los rostros de varios candidatos. Así, si se marca una bandera, el voto se divide entre todos los candidatos de ese partido; en caso de que se marquen rostros, ya sea del mismo partido o de diferentes, el voto se divide entre el número de marcas que se haga. Entonces, para contar los votos se siguen tres pasos. El primero consiste en dividir el total de votos válidos en cada departamento entre el número de diputados que le corresponden. De esa forma se obtiene lo que se denomina el “cociente electoral” departamental, que es el número de votos que necesita un partido para tener un diputado. Una vez conocido ese cociente, viene el segundo paso: se divide el total de votos que obtuvo cada partido en el departamento entre el cociente electoral respectivo. Así se sabrá cuántos diputados obtuvo cada partido. Luego de un primer reparto, si aún quedan diputados por asignar y ningún partido tiene el número de votos requerido, el o los partidos que tengan una fracción mayor se llevan los diputados que falten. Por eso el sistema empleado se llama de cociente y residuo.
Una vez se ha determinado cuántos diputados le corresponden a cada partido, viene el tercer paso: establecer quiénes en concreto son los diputados elegidos para cada partido. Para ello es que se utilizan las marcas sobre el rostro: de entre todos los diputados de un partido, se escoge a los que han obtenido más marcas, hasta cubrir el número de diputados que le corresponde a ese partido. Por eso es importante que si se vota por bandera, también se marque el rostro de los candidatos que mejor representen los intereses del votante. Igualmente importante es saber que cuando se cruza el voto y se marcan los rostros de candidatos de distintos partidos, el voto se reparte entre los partidos políticos de los candidatos que se han señalado en la papeleta.
Como es lógico, en esta ocasión el conteo de los votos será un poco más complicado y, por ello, más tardado. No solo se procesarán los resultados de tres tipos de papeletas (para Parlamento Centroamericano, Asamblea Legislativa y alcaldías), sino que, además, en el caso de los diputados del Parlacen y de la Asamblea, se harán dos conteos: el de los partidos y el de los candidatos de cada partido. Habrá, pues, que tener paciencia y no dar ningún aviso por adelantado hasta no conocer el resultado oficial de las elecciones.