Entre laboratorios y ciencias

Cientos de análisis, pruebas y experimentos se llevan a cabo año con año en los distintos laboratorios científicos de la Universidad. El equipo tecnológico con el que se cuenta permite a los catedráticos de las diversas áreas de la ingeniería elaborar estudios e investigaciones; y a los estudiantes, realizar sus prácticas académicas.

Actualmente, existen en el campus más de quince laboratorios relacionados con las áreas química, eléctrica y ambiental, entre los que están los de Química General, Mecánica de Fluidos I y II, Sistema de Información Geográfica, Señales Analógicas, Instrumentación Virtual, Automatización Industrial y Microbiología Aplicada, ubicados en los edificios de Ingeniería y "Jon de Cortina, S.J.".

Estos espacios son utilizados tanto por catedráticos e investigadores como por estudiantes o egresados en proceso de graduación de carreras como Ingeniería Eléctrica o Ingeniería Química.

Por ejemplo, el Laboratorio de Calidad de Aire cuenta con el equipo necesario para el análisis de material particulado que existe en el ambiente o que es expulsado por algunas industrias textiles. "Todo el equipo con el que se cuenta está aprobado por la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés). Por esto, estamos calificados para realizar investigaciones y ofrecer servicios a instituciones como el Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales", explica Roberto Rivas, encargado del Laboratorio.

Los primeros proyectos sobre análisis del aire se realizaron en la Universidad en 2003. Desde entonces, se ha colaborado con ingenios azucareros y con industrias que trabajan en base a combustible fósil o con fertilizantes. "Lo que se hace es analizar la ceniza que expulsan las industrias (a través de las chimeneas) y medir la contaminación que se genera a partir de la emisión de partículas", afirma Rivas.

Además del equipo técnico de medición, el Laboratorio dispone de diversos programas que ayudan a digitalizar los resultados. Uno de ellos es el software ISC-Aerwod, que muestra de manera computarizada un mapa de la zona estudiada y la intensidad de partículas contaminantes que existen en el ambiente.

Por otra parte, en el Laboratorio de Tecnología de Procesos se realizan análisis de aguas, sedimentos, oxígeno y nitratos; además, se lleva a cabo la separación de compuestos y la limpieza de aguas. En el de Análisis Instrumental se aplican procesos de absorción atómica de diversos compuestos, a través de los cuales se identifica la presencia y cantidad de calcio, magnesio, potasio, sodio y zinc. Y en el de Calidad Ambiental se examinan sustancias para detectar residuos de pesticidas organoclorados altamente tóxicos como el DDT (diclorodifeniltricloroetano). Este laboratorio se ha utilizado en diversos proyectos impulsados por el Departamento de Tecnología de Procesos y Sistemas, como el que se llevó a cabo en la Bahía de Jiquilisco.

Los laboratorios citados, entre otros (como los de Física, Trabajo Asistido y Ciencia y Tecnología de Alimentos), se suman al resto de iniciativas que impulsa la Universidad a favor del desarrollo científico-social en nuestro país.