La experiencia Erasmus

El programa Erasmus Mundus fue creado por iniciativa de la Comisión Europea para fortalecer la cooperación internacional entre instituciones de educación superior de América Latina y Europa, y optimizar la formación por medio del intercambio de conocimientos.

Para seleccionar a las universidades que participan en las convocatorias de Erasmus Mundus, distintas instituciones de educación superior de Europa coordinan la creación de consorcios, que luego son propuestos a la Comisión Europa, la cual selecciona al grupo de casas de estudio a las que se les otorgarán las becas del programa.

En la convocatoria LOT 20, lanzada a finales del año pasado, la UCA, junto a la Universidad de El Salvador, se incorporó a uno de los consorcios participantes gracias a la invitación de la Universidad de Groninga (Países Bajos). Este grupo, conformado por siete universidades europeas, ocho centroamericanas y cinco mexicanas, fue seleccionado por la Comisión, y, así, se le asignaron 30 becas para estudiantes y docentes europeos, y 122 para latinoamericanos.

En la UCA, para seleccionar a los postulantes y garantizar su calidad académica, se creó un comité evaluador, que estuvo conformado por Celina Pérez, vicerrectora Académica; María de los Ángeles Torres, jefa de la Oficina de Cooperación Internacional y representante de la UCA en el consorcio; y Mario Dimas, director de Desarrollo Estudiantil.

De acuerdo a Torres, luego de la convocatoria, se recibieron más de 20 solicitudes, de las cuales el comité seleccionó a las siete que cumplieron con las condiciones requeridas por la Comisión Europea. "Hay mucha exigencia, es una competencia internacional y se requieren candidatos fuertes", explica.

Posteriormente, en el proceso de selección de candidatos finales, en el que participaron todos los representantes de las universidades miembros del consorcio, cinco becas fueron otorgadas a El Salvador; de estas, una se concedió a un estudiante de Ingeniería Química y tres a graduados, todos de la UCA. Valora Torres que "esto podríamos verlo como positivo, pues de los siete que apoyó la Universidad, seleccionaron a cuatro; mientras que de los 19 propuestos por la UES, solo se seleccionó a uno".

La experiencia le permitió a la UCA posicionarse en el ámbito internacional, entablar nuevas relaciones con otras instituciones de educación superior y mostrar el nivel académico de sus estudiantes y graduados. Por otro lado, según Torres, la participación en la convocatoria LOT 20 significó para la Universidad plantearse nuevos desafíos y retos: promover la internacionalización de los estudiantes y crear estrategias para garantizar, institucionalmente, la movilidad estudiantil, entre otros.

Para los becados, la experiencia, en realidad, apenas comienza. Rafael Zepeda, graduado en 2008 de Ingeniería Civil, iniciará en septiembre de este año la Maestría en Mecánica de Suelos en la Universidad de Lille 1 (Francia). El joven profesional dice que su interés en el estudio de suelos y mitigación de riesgos surgió gracias a una catedrática de la UCA, quien le hizo ver que en el país, pese a la vulnerabilidad que lo caracteriza, son pocos los ingenieros dedicados a esa área. Por ello, entre sus principales objetivos está prepararse para aportar conocimiento en temas de construcción y desastres naturales: "Lo veo como una oportunidad de estudiar y aprender, para regresar y poder trabajar con alguna institución gubernamental y ver si, poco a poco, se pueden realizar estudios serios de mitigación de riesgos", señala.

Ese deseo de aportar al país es compartido por Rafael Klee, estudiante de Ingeniería Química y becado para estudiar diez meses en la Universidad Autónoma de Madrid (España): "Quiero adquirir conocimiento, sobre todo, en temas de energías renovables y procesos de separación de químicos (...) y, así, tomar ideas para mejorar al país". Para Klee, la oportunidad que se le ha dado también significa responsabilidad: "Espero representar bien al país, demostrar que acá hay cosas buenas".