2015 será un año importante para la UCA, pues se celebrará el quincuagésimo aniversario de su fundación y se culminará la ejecución del Plan Estratégico Institucional (PEI) que inició en 2009. Por esto, el Seminario Interno, que se llevó a cabo el 27 y 28 de febrero en el Auditorio "Segundo Montes, S.J." y el edificio del ICAS, se centró en analizar y reflexionar sobre la Universidad que se aspira construir para 2015.
En sus palabras de apertura, Andreu Oliva, rector de la UCA, afirmó que las casi cinco décadas de trabajo han sido para la Universidad años "muy fecundos", pues "se ha incidido en la realidad de El Salvador". Por este vínculo entre realidad y quehacer universitario, Oliva explicó que es necesario contextualizar la visión de la UCA. Acá, destacó la crisis económica mundial, la pobreza, la violencia, la impunidad y las políticas gubernamentales que van hacia la militarización, así como el desencanto con la política.
Siguiendo con el programa, para el panel-foro "Visión de la UCA 2015: cinco reflexiones críticas", se dio la palabra a igual número de miembros de la comunidad universitaria: Amparo Marroquín, directora de Postgrados; Carlos Corado, director de Audiovisuales; Gabriela Santos, miembro del Consejo Estudiantil; María Dolores Rovira, catedrática e investigadora del Departamento de Ingeniería de Procesos y Ciencias Ambientales; y Roberto Góchez, catedrático e investigador del Departamento de Economía. Los panelistas se centraron en dos temas fundamentales: la docencia y la investigación.
En términos generales, sobre la docencia se destacó la importancia de educar integralmente y para el cambio social, no para la adquisición de bienes y la reproducción de un sistema injusto de raíz. También se habló sobre la importancia de que la Universidad defina cómo tratar con los estudiantes de nuevo ingreso que muestran las deficiencias propias del sistema educativo nacional. Esto último implica que la UCA debe encontrar un equilibrio entre la exigencia académica que la caracteriza y el acceso a la educación para las mayorías.
Desde el punto de vista estudiantil, Gabriela Santos hizo hincapié en la necesidad "de docentes que se identifiquen con la Universidad" y en la construcción del perfil del alumno que se quiere formar, lo que derivará en el profesional que la UCA entregue a la sociedad.
En cuanto a la investigación, las reflexiones giraron en torno al papel protagónico que esta debe tener en el quehacer universitario. Amparo Marroquín señaló que hay que reforzar la publicación de las investigaciones, crear espacios de reflexión y redes de discusión. Sin embargo, aclaró que "publicar no debe ser un espacio para legitimar egos (...), no se debe publicar para unos cuantos académicos y especialistas, sino para que la sociedad tenga herramientas para la discusión".
Por su parte, María Dolores Rovira aseguró que si bien existe una clara apuesta por potenciar la investigación, son pocos los profesores que hacen estudios a profundidad, lo que provoca que las investigaciones sean aisladas. "No hemos logrado construir grupos de investigación, no mantenemos una investigación en el tiempo (...) no logramos profundizar ni especializarnos en una misma área", afirmó.
A juicio de Roberto Góchez, hay pocos recursos efectivos para la investigación y existe el peligro de limitarla a la consultoría privada. Esta, si bien constituye una opción para gestionar fondos propios y potenciar ciertos estudios, hace depender la investigación "de la agenda de otros". Y si esta tarea del quehacer universitario se vuelve dependiente de sectores externos, se puede dar un "debilitamiento de la investigación, que conlleva un debilitamiento de la proyección social misma".
Los planteamientos expuestos en el panel-foro fueron retomados durante el trabajo en grupos y luego se compartieron los acuerdos en una plenaria general. Entre los aportes, destacó la propuesta de crear un instituto o una vicerrectoría de investigación que regule, gestione, dicte lineamientos y promueva la investigación en la Universidad. También se propuso mejorar el acceso a la tecnología y trabajar por tener mayor incidencia a nivel político.
Para la jornada de la tarde del 27 de febrero, Lidia Salamanca, vicerrectora académica, impartió la ponencia "La UCA del período 2006-2010: información y datos de una institución en crecimiento". Los temas abarcados y los datos comparativos presentados fueron sobre la gestión académica, la proyección social, el desarrollo estudiantil, la comunicación institucional, las relaciones institucionales y los grandes proyectos realizados.
Estos datos permiten concluir que la UCA es una universidad en desarrollo, pues de 2006 a 2010, pese a que se ha mantenido un número estable de estudiantes, ha aumentado en cantidad y en formación el plantel del personal académico. Además, hay apertura a formas más flexibles de formación y especialización profesional, como los diplomados y los cursos; y existen oportunidades de formación para el personal de la Universidad.
Pero también al analizar la información de manera comparativa se detectan temas pendientes, como la elaboración de un sistema de evaluación de la calidad académica, la necesidad de mayor articulación entre las unidades académicas y de proyección social, el fortalecimiento de los vínculos con los egresados y con otras instancias que retroalimenten en términos de impacto social y cumplimiento de la misión institucional.
Para que los participantes del Seminario tuvieran un idea de todo el panorama de la UCA, también se desarrolló la presentación "Las finanzas de la Universidad: balance detallado de los tres últimos años", que estuvo a cargo de Axel Söderberg, vicerrector financiero.
Al día siguiente, durante la mañana del 28 de febrero, el Rector abordó "Los retos de la UCA frente a su 50.º aniversario". En su intervención retomó las ideas y planteamientos básicos elaborados por Ignacio Ellacuría y su forma de entender el quehacer de la Universidad, que reflejan "el valor de una plataforma universitaria para defender al pueblo". Asimismo, reflexionó sobre la importancia del trabajo en equipo para alcanzar los objetivos y ser fieles a la misión institucional. "La Universidad debe decir una palabra para ayudar a la solución (de los problemas nacionales)", y para ello debe "pasar de la crítica a la proposición".
Para ampliar sobre la incidencia social y académica de la UCA, el vicerrector de Proyección Social, Omar Serrano, y Lidia Salamanca presentaron los planes de trabajo que se desarrollarán a partir de este año en sus respectivas áreas. En proyección social, sobresale la elaboración de un plan de país que abordará cinco grandes ámbitos: seguridad, justicia, economía, medioambiente y reconciliación nacional.
Con el fin de darle seguimiento y garantizar la implementación de las propuestas planteadas por los participantes del Seminario, a finales de marzo se llevará a cabo un nuevo encuentro.
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